viernes, 10 de julio de 2020

Supuesto virus SARS-CoV-2



Apuesto a que este supuesto virus, al igual que el supuesto virus VIH, tampoco existe.

No tengo la seguridad que tengo con el supuesto VIH, con el que apostaría una buena cantidad a que no existe. Este supuesto virus fue puesto en cuestión por unos científicos llamados Grupo de Perth, quienes afirmaron y argumentaron, con una insólita seriedad y rigurosidad, que desde que supuestamente se descubrió (en el año 1983) nadie ha demostrado su existencia. Y estoy bastante convencido de que tienen razón.

Para el supuesto virus SARS-CoV-2 no ha aparecido nadie todavía con esa seriedad y rigurosidad, pero sí hay voces disidentes que intuyo que también tienen razón.

El disidente más relevante es el biólogo alemán Stefan Lanka, que también puso en su momento en cuestión al supuesto virus VIH (y también pone en cuestión a todos los virus). Para el supuesto SARS-CoV-2 tenemos estos enlaces en castellano:

El principio y el fin de la crisis del coronavirus (en pdf)

El principio y el fin de la crisis del coronavirus (otra traducción)


Otro disidente es el doctor Andrew Kaufman (influenciado por Lanka). Os pongo aquí un enlace a vídeos suyos (también hay vídeos en youtube, pero creo que están siendo borrados):

Vídeos de Andrew Kaufman



¿Significa esto que todo lo que nos cuentan es mentira, que hay un engaño?


No, yo no digo eso.

Pienso que lo que nos cuentan en los medios de comunicación, mismamente sobre la saturación de los hospitales con enfermos de supuesto SARS-CoV-2 y las muertes por este supuesto virus, es verdad. No pongo en cuestión eso para nada.

Pero otro asunto distinto es saber si, en verdad, se enferma por ese supuesto virus, o bien hay alguna otra causa o causas.

Tampoco pienso que hubiera una mala intención en atribuir lo que está pasando a un supuesto virus. Puede tratarse, perfectamente, de un error, de un inmenso error. Y, en todo caso, la posible mala intención es algo muy difícil de demostrar.

Por tanto, no estoy de acuerdo con las opiniones que hablan de engaños o fraudes, y que podemos encontrar en la red (en foros o blogs). Además, pienso que estas opiniones perjudican a la disidencia que trata de poner en cuestión, de un modo serio y objetivo, al supuesto virus SARS-CoV-2.



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