sábado, 11 de abril de 2020

El mundo está muy mal




Esa es mi impresión, que el mundo está rematadamente mal.


Lo primero que alguien podría alegar es que el mundo siempre ha estado muy mal. Quizá tenga razón, pero es posible que ahora esté peor que nunca.

Por ejemplo, alguien podría hablar acerca de la II Guerra Mundial, con 60 millones de muertos. Pero eso fue un momento puntual en la historia, de 6 años de duración. Sin embargo, ahora nos encontramos, mismamente, esto:


Más de cien millones de personas sufren la forma más grave de hambre


Quizá durante la II Guerra Mundial también había mucha pobreza y muchos muertos por dicha pobreza en el mundo, pero tengo alguna duda de que afectara a tantas personas, incluso haciendo la cuenta en proporción relativa a la población total. Quizá ahora muere o sufre más gente que nunca y, en general, las diferencias económicas entre personas de distintos estados o países, y dentro de un mismo estado o país, parecen ahora mayores que nunca.

Eso sería, en mi opinión, un motivo fundamental para ya decir que el mundo está muy mal.

Pero, además, esto sería sólo el primer capítulo. El segundo sería los posibles errores clamorosos de la ciencia, como la probable no existencia del virus VIH, que podría ser, además, la punta de un iceberg muchísimo mayor. También la posible validez de la homeopatía, despreciada por la medicina oficial; o del MMS o CDS, que podría ayudar enormemente en la actual pandemia del supuesto coronavirus, y sin embargo se censura e incluso persigue a sus promotores. Por otro lado, sin embargo, tenemos los grandes beneficios de las empresas farmacéuticas.

Continuaríamos por la gigantesca industria armamentística (sobre todo la de Estados Unidos), el negocio de la droga, el negocio de la prostitución ...

También la manipulación informativa a gran escala, con la demonización de grupos de resistencia, sea la árabe, la vasca o la colombiana (se nos muestran como los únicos "terroristas"), y la censura a los disidentes, que somos una minoría.

La demonización incluso de países enteros, o al menos de sus gobiernos, como Irán, Corea del Norte, Cuba y Venezuela, cuando desde nuestros propios países occidentales quizá no deberíamos, en absoluto, tirar la primera piedra.

Sabiendo que quizá alguien diga que esos gobiernos no son democráticos, habría que analizar, en primer lugar, si la democracia la garantiza el hecho de depositar un papel en una urna cada cuatro años, o son necesarias más cosas. Y después, que en Venezuela sí hay elecciones, reconocidas por observadores internacionales. Y si aún así no les vale Venezuela, podría mencionar también Bolivia, con el gobierno anterior de Evo Morales (derrocado tras unas elecciones limpias), y con el cual, además, la economía crecía a muy buen ritmo.



¿Podría estar pasando algo más, aparte de que el mundo pudiera estar tan mal?


Sí, también podría estar ocurriendo algo más. Y si no ocurre, podríamos perfectamente hablar de muchas casualidades.

Tenemos en primer lugar a la única superpotencia actual, Estados Unidos, con miles de armas nucleares y un presupuesto militar que se acerca, o incluso supera, el del resto de los países del mundo juntos.

A continuación, las informaciones sobre el supuesto nuevo orden mundial, que la ultraderecha podría haber planeado desde hace mucho tiempo, y que podría acercarse el momento de llevarlo a cabo.

Por otra parte, de nuevo mencionar la probable no existencia de virus VIH, que podría ser clave respecto a muchas cosas, y que yo como disidente llevo "erre que erre" desde principios del año 2003 insistiendo sobre el tema en Internet.

El que otros también lleven erre que erre sobre otros asuntos, como por ejemplo la aclaración del atentado del 11 de marzo de 2004 en Madrid, que causo casi 200 muertos entre personas meramente civiles y trabajadoras, y que quizá nos acabemos enterando finalmente si "fue ETA", o fueron otros responsables distintos. El que el atentado a las torres gemelas del 11 de septiembre de 2001 quizá tampoco sea lo que nos han contado.

Que precisamente algún conflicto importante, como el vasco o el catalán, podría estar llegando a un momento decisivo, aunque el estado español ha continuado con bastante violencia y represión. Además, los medios nacionalistas españoles, como puedan ser Libertad Digital y esRadio, continúan con la misma posición reaccionaria.

Y también esa profecía de Pedro el Romano, y la coincidencia en el tiempo.



¿Vencerá la ultraderecha?


No soy adivino y, por tanto, no tengo ni idea del hipotético destino y si la ultraderecha, que supuestamente quiere imponer el espantoso nuevo orden mundial, conseguirá sus objetivos.

Pero sí mencionaré que, al igual que hay una única superpotencia con miles de armas nucleares que podría hacer lo que le diese la gana en el mundo, por otra parte también tenemos mismamente Internet, y el que un posible lunático como yo pueda tener un modesto blog, y que cualquier otra persona pueda simplemente leerle.

Esa coincidencia en el tiempo podría ser significativa.



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