El tema de las medicinas y terapias alternativas, si hay que prohibir y reprimir su difusión, y venta o ejercicio, es un tema muy delicado en el que de momento no tengo una opinión suficientemente formada. Sin embargo, como algunos ya sabéis, estoy completamente convencido de que el virus VIH no existe, de que es un inmenso error de la medicina actual (para más información ver esta entrada), y estoy obviamente a favor de que haya un debate definitivo entre oficialistas VIH-Sida y disidentes del supuesto virus.
Además, no descarto para nada que el error anterior pueda ser aún mayor (no existencia de ningún virus, mismamente), o que haya otros grandes errores en la medicina.
Por tanto, mi posición en principio sería a favor de que haya libertad de expresión y haya cualquier debate.
No obstante, ya he visto que desde la propia izquierda ideológica se intenta prohibir las voces disidentes. Como muestra tenemos este artículo de Pascual Serrano (persona bastante conocida en los ambientes de izquierdas) en donde se compara el debate sobre el MMS con debates sobre "la superioridad de la raza aria", o sobre "el internamiento de homosexuales".
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